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Vainilla X en Visceral


Luego de una lluvia que se veía interminable, por suerte se detuvo, dando un marco más agradable para uno de los festivales artísticos más importantes de la ciudad de Villa Ballester.

Música, fotos, cuadros y muchas más exposiciones artísticas.

Visceral es un festival organizado por músicos, fotógrafos y otros artistas plásticos del noroeste del conurbano bonaerense y esta es su primera presentación, que no espera ser la última, ya se vienen programando fechas para cada mes dentro del partido de San Martin y también en la Ciudad de Buenos Aires.

Partido de San Martín Alberdi 4449, cerca de la estación de Ballester, está situado el club de la música, donde fue realizado este importante evento con el objetivo de fomentar una movida cultural, y darles espacio a músicos y otros artistas de la zona.

Entre los artistas presentes se encuentra una de las mejores bandas del momento para mi, estoy hablando de Vainilla X, banda formada en el 2013 compuesta por Iván Melink (bajo y voz), Rodrigo Montenegro (guitarra/teclado y percusión), Julián Olini (batería y coros), Germán Ferraro (guitarra/teclado y voz) y Federico Marchetta (guitarra/teclado/trompeta/violín y voz).

Este acontecimiento fue un éxito ya que habrán concurrido más de doscientas personas y no solo habitantes del partido.

Además, Vainilla X compartió escenario con otras dos bandas también reconocidas a nivel local como The Niros y Remis Universo.

El nombre surgió de satirizar nombres de remakes de películas imaginarias, su primer ep fue grabado durante el verano de 2017 en los estudios La Aldea, con la grabación y mezcla de Leonel Calo y Maxi Leivas.

Bajo el título de sopa salvaje, en el cual se puede apreciar un camino de exploración de canciones que se fusionan con un instinto primal. Se trata de una declaración de principios con sonidos que se conducen por el blues, rock, el pop, el indie y el progresivo; siempre con la intención de declamar una fuerza instintiva y fundante, sin dejar de lado la belleza y la sensibilidad.

Villa Ballester se caracteriza por darle un espacio siempre a la cultura, donde músicos independientes con temas propios pueden exponer su repertorio, Vainilla X desde que comenzó a tocar en lugares, ha transitado varias zonas de Ballester y sus alrededores. Y en conciertos se puede notar que es un lugar donde la mayoría de sus habitantes se conoce, y comparten inquietudes artísticas, a diferencia de otros rincones del conurbano bonaerense. Es un lugar con matices desde lo bacán hasta una villa de emergencia con pocas cuadras de diferencia, pero aun así deja respirar lugares para enseñar y fomentar el arte. Siempre aparece un espacio nuevo, una movida que no conoces, y como en todos lados, hay una dualidad y algo porque pelear. Es una ciudad ubicada en la parte céntrica del partido de San Martin, que se encuentra en la zona norte del gran Buenos Aires, sus habitantes se relacionan entre sí con los barrios vecinos del partido que la componen y de otros partidos limítrofes, ya que, Vainilla X en su formación, está integrada por Iván Melink (San Martin), Rodrigo Montenegro (Boulogne), Julián Olini (Malaver), Germán Ferraro (Villa Ballester) y Federico Marchetta (C.A.B.A.)

“Fue un buen espacio para que vengan buenas bandas a desplegarse” comentaba Federico Marchetta (guitarra/teclado/trompeta/violín y voz) mostrándose muy conforme con lo acontecido durante el espectáculo, desde el camarín del club de la música, mientras cambiaba las cuerdas de una criolla que no tuvo lugar en el escenario de este show.

Orgulloso se mostraba, sobre como en este país, podes encontrar mucho talento, viajando en el transporte público, y se puede conocer muchas variedades sobre la música.

Si bien había preocupación por las condiciones climáticas ya que llovió durante la semana y sobre todo a la mañana/tarde del domingo día en el cual se organizaba el evento, la convocatoria fue increíble, fue incluso más de lo esperado. La gente quedó encantada no solo con bandas sino también con las muestras y los stands.

Bandas y expositores quedaron conformes con el desarrollo, lo cual muestra que es un paso importante para organizar eventos que integren mucho más artistas y público sin terminar siendo una máquina de facturar a toda costa sin importar ni el vínculo entre los participantes.

“En cuanto al lado económico o ligado a la profesión hoy en día tenes que hacer un montón de cosas ligadas a la prensa, difusión organización y administración” decía Iván Melink (bajo y voz) en el patio, luego del show, refiriendo a como es la vida de un músico actual en sus comienzos, mientras de fondo se escuchaba Pixies una de las bandas influyentes para Iván porque le mostraron otra intensidad de la música, y una mística que le pareció muy fuerte. Hasta hace poco el había comentado que no se consideraba músico, le gustaba verse como alguien que se expresaba y hacia sonidos que era simplemente una herramienta. Y que recién ahora estaba más amigado con el mote de músico pero sin perder ese sentido lúdico inicial.

Iván comentaba, que tanto él como los otros miembros de Vainilla X trataban de dedicar todo tiempo libre a la composición, y que a él le gustaría poder vivir de la música.

Respecto a lo académico, Iván tomó algunas clases de bajo y ahora se encuentra perfeccionando su voz, porque además de ser el bajista de la banda, establece el rol de cantante, sobretodo en la mayoría de los nuevos temas de Vainilla.

Para grabar su primer EP la banda tuvo que alquilar y acustizar el espacio de grabación, ya que grabar temas es muy costoso, lo cual hace difícil llegar al número que se pide por una grabación profesional, además los grupos que se están iniciando, tienen que bancarse que los pisoteen, pidiéndole acuerdos ridículos para tocar en lugares.

Una vez finalizado el concierto, se guardaron los instrumentos y el festival siguió hasta la madrugada, se pasó música bailable, y se pudieron apreciar las exposiciones artísticas que también eran una parte importante de este evento.

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